E N R I Q U E A L D U N C I N A B I T I A
En el promedio de las encuestas publicadas (Encuesta de encuestas), de abril a mayo se aprecia un declive del PRI de 2.7 puntos porcentuales (pp), y baja de 41.9 a 39.2%, a la vez que avanza el PAN 2.3 pp, de 35.1 a 37.4%. La diferencia entre los dos punteros se estrecha a sólo 1.7 pp cuando el mes previo alcanzaba 6.8 pp; la brecha disminuye 85% (5 pp).
Si bien el PRI se mantiene en el primer sitio, su ventaja es menor al margen de error de las encuestas, por lo que no se puede desechar la situación de que el PAN ya esté arriba del tricolor. El PRD continúa rezagado, con una intención de voto de 16% (un decremento respecto a abril de 0.6 pp).
Los partidos pequeños avanzan 15.6%, entre todos suman 7.4% (por lo que tuvieron un aumento de un punto porcentual respecto a abril). Las estimaciones estadísticas de las cuatro casas encuestadoras que publican hasta el 15 de mayo muestran discrepancias mayores al mes previo y, por ende, menor grado de acuerdo en sus estimaciones.
Las más amplias son las del PAN, que tiene un rango de 11.2 pp (en abril era de 6 pp), su máximo es de 44.7% (Berumen) y su mínimo de 33.5% (Consulta), su desviación estándar es de 4.6 pp (en abril era de 2.1 pp), su cota superior es de 42 y la inferior de 32.8%. Para el resto hay consenso: el PRI varía en un rango de 4.2 pp, con un máximo de 41% (GEA-ISA) y un mínimo de 36.8% (Berumen), su desviación estándar es de 1.7 pp, y su intervalo de confianza se define por una cota superior de 40.9% y una inferior de 37.5%. El PRD presenta un rango de 6 pp, con máximo de 19% (Demotécnia) y mínimo de 13% (Berumen), su desviación estándar es de 2.8 pp, su límite superior es de 18.8% y el inferior de 13.2%. En el promedio de las encuestas la suma de los cuatro partidos pequeños es de 7.4%, su rango es de 7 pp, con un máximo de 12% (Reforma) y mínimo de 5% (GEA-ISA), su desviación estándar es de 2.8 pp, el límite superior es de 10.2 y el inferior de 4.6%.
La situación a 50 días de la elección muestra un empate técnico entre el PRI y el PAN, un PRD que se mantiene pero no avanza y los partidos chicos comienzan a incrementar su intención de voto. Destaca la alta estimación de Reforma para el Verde (9%), al que le siguen el Partido del Trabajo y Convergencia.
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