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Cine mudo sin silencio: Nosferatu musicalizado en la Cineteca
Blog | Optográfica | Helena Okón | 27.09.2011 | 0 Comentarios

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El próximo sábado primero de octubre, la Cineteca Nacional presentará la película silente “Nosferatu. Una sinfonía del horror” musicalizada en vivo por el grupo Los Dorados, cuyo estilo une jazz, electrónica y rock. Presentada como parte de la serie “Bandas Sonoras. Cine mudo a ritmo de rock”, ésta fue la primera versión fílmica de la historia de vampiros que publicara Bram Stoker en 1897 con el título “Drácula”. La película es un caso notorio de cómo el amor público a una obra puede salvarla de las necedades derivadas de los derechos de autor, así como una película que se renueva constantemente por medio del acompañamiento musical en vivo.

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F.W. Murnau, director de “Nosferatu”, deseaba fervientemente realizar una versión en cine de “Drácula”. Tras fracasar al tratar de obtener derechos sobre la historia, decidió crear la suya propia, cambiando nombres y escenarios. Desafortunadamente para él, sus cambios no fueron substanciales. El guión, realizado por Henrik Galeen, es realmente un paralelo constante a la historia de Stoker, lo que condujo, lógicamente, a que la viuda de Stoker demandar a Murnau y al estudio por violación de derechos de autor.

Cuando el juicio llegó a su fin la viuda de Stoker había triunfado, y el estudio Prana Films que producía la película se fue a la quiebra, mientras un tribunal ordenaba la destrucción de todas las copias de la que ahora es considerada una obra maestra del expresionismo alemán. Sin embargo, la película ya había sido distribuída, y varias copias se mantuvieron en manos de particulares, quienes las preservaron y copiaron, para fortuna de la historia del cine. Filmada en Eslovaquia, la película es una obra oscura y mecánica en su tenebrosidad, protagonizada por el extraordinario, y en realidad nada misterioso, actor Max Schreck como el Conde Orlok, el equivalente de Drácula.

Olvidamos demasiado a menudo que al cine silente le acompañó siempre la música, e incluso en algunos casos la voz de actores en vivo. En Japón, por ejemplo, se estableció un oficio especial, los “benshi”, que narraban y dramatizaban las historias del cine mudo, incluso adaptando partes de la historia a las sensibilidades del público japonés. Es interesante recordar que el cine nació de la mano de otras artes. Sin el teatro y sin la música no sería tal, y la reconstrucción del cine mudo musicalizado da fe de ese proceso. Hace años tuve el placer de ver “Nosferatu” musicalizada en vivo en la Facultad de Arquitectura. No recuerdo el nombre del grupo, pero no olvido el extraño sentimiento de estar reviviendo una etapa de la historia del cine, si bien de manera un poco más moderna. Estoy segura que esta nueva puesta será una experiencia muy distinta, pues el magnífico ejercicio de musicalizar el cine mudo reanima siempre el ejercicio interpretativo por parte de los músicos, y garantiza que cada puesta en pantalla sea única e irrepetible.

“Nosferatu”, musicalizada por Los Dorados se presentará en la Cineteca Nacional el sábado 1 de octubre de 2011, con funciones a las 17:00 y a las 20:30 horas.

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