Sunday, 05 May 2024
Artículos relacionados
Long Play: El terciopelo nació de un avestruz
Blog | Long Play | Rocío Franco López | 17.05.2013 | 0 Comentarios

RocioLongPlay

 

“The Ostrich”, “Sneaky Pete” (7” vinil),

The Primitives, John Cale y Lou Reed,

Nueva York: Pickwick City Records, 1964, 4:44.

 

De izquierda a derecha: Tony Conrad, Lou Reed, John Giuffre (un músico de Pickwick), Walter de Maria y John Cale.

De izquierda a derecha: Tony Conrad, Lou Reed, John Giuffre (un músico de Pickwick), Walter de Maria y John Cale.

Así como uno sabe que en la prehistoria de la historia hubo dinosaurios y cavernícolas es que he descubierto que en la prehistoria del terciopelo danzaba un avestruz.

Corría el año de 1964, Lewis Allen Reed andaba buscándose por el mundo. Tenía 22 años de edad y desde que cursaba la secundaria no había parado de tocar la guitarra en distintas bandas de rock’n’roll. Comenzó a grabar a los 13 años y tenía ya un rato componiendo canciones desechables, que no siempre aparecían con su nombre, para una disquera independiente llamada Pickwick City Records. Y aunque había formado ya varias bandas ninguna lo satisfacía, sólo estaba seguro de que estaba harto del pop, que los Beatles no eran lo máximo para él, y que quería vivir en Nueva York, en donde ya compartía un departamento sin calefacción en el que para agarrar calor tenían que juntar cartones y muebles que quemaban en la chimenea.

Lou Reed

Lou Reed

John Cale

John Cale

Por otro lado andaba John Davies Cale, quien también tenía 22 años, un chavo galés que estudiaba música gracias a una beca de Leonard Bernstein y había pasado por la universidad de Londres, le interesaba la música de Stokhausen y John Cage, tampoco le gustaban los Beatles, estaba obsesionado con el sonido de su viola y con que el ruido del motor de los aviones podía emplearse como instrumento musical. Incluso había sorprendido a sus profesores dando un recital en el que la música provenía de la destrucción de una mesa con un hacha.

En ésas andaban y así era su vida cuando se conocieron en una fiesta en Long Island. Los presentó Terry Phillps —quien pensó que podrían hacer buen pop porque tenían el cabello largo, jajaja—, el productor de Pickwick City Records, con la idea de que grabaran una canción recién compuesta por Reed.

Y fue así como grabaron un sencillo con dos canciones, “The Ostrich” y “Sneaky Pete”, para lo cual formaron una banda ficticia conocida como The Primitives, el apenas germen de una larga y trascendente historia musical.

The Primitives hizo una pequeña gira por la Costa Este y más tarde se disolvió para convertirse en la legendaria Velvet Undreground. (Ya en otra ocasión hablaremos con detalle de la historia de Velvet Underground con Warhol y Nico.)

 

The Primitives

 

The Ostrich

 

The Ostrich es una rola que suena a chicos salvajes de secundaria con todas sus hormonas, está compuesta apenas con tres acordes y con un afianción particular de la guitarra, a la que más tarde se le llamaría “guitarra avestruz” y por la que Lou es reconocido. Aunque Cale y Reed lo detestaban, tiende al pop, pero se adereza con algunos dejos de R&B y unos gritos que al parecer a Lou le venían de sus conocimientos del góspel. Es una mofa de la tendencia por aquella época de usar estolas con plumas de avestruz y de los pasos de baile a-go-go, dice algo así como “Meta la cabeza de su compañero en la tierra y baile como un avestruz”. La otra rola es la de “Sneaky Pete” y hay muy pocos datos de ella. Ambas nunca fueron vueltas a grabar y son toda una rareza.

 

Sneaky Pete

 

Dejar un comentario



El timbre de las campanas: Dos encuentros con la lengua de los otros
En el mixe de Ayutla, tääy significa “ser chistoso/ser gracioso/ser ocurrente” y en el mixe de Tlahuitoltepec significa “mentir”. Una sutil diferencia que en ciertos contextos me ha puesto en aprietos: “¿me estás mintiendo?” me preguntan y yo entiendo “¿estás siendo graciosa? ” a lo que, con entusiasmo, y con un guiño en el ojo, […]
Maxu’nk: Duérmase mi niño, duérmaseme ya Canciones de cuna en las lenguas del mundo
En algunas comunidades mixes se cree que los recién nacidos traen consigo un torta lingüística bajo el brazo: entienden una lengua universal que después se irá puliendo con las palabras de los adultos hasta sacar de ella un diamante prístino: el ayuujk. En sueños, algunas veces podemos recordar esa lengua universal con la que nacemos […]
México en el mundial: crónica de una mediocridad anunciada
Hace cuatro años, el director técnico de la selección mexicana, Javier Aguirre, ofreció una opinión honesta de las posibilidades de su equipo en la Copa Mundial de 2010:   “Se genera mucha expectativa respecto al equipo mexicano y luego hay voces que salen de tono, ¿Campeones? México es lo que es, fue 15 en Alemania, […]
Otra vez… los libros, la SEP y las cuentas que no paga
El Domador de Polillas | Rocío Franco López           Como ya lo dije en alguna otra ocasión [http://archivo.estepais.com/site/?p=47371] la manufactura de libros de texto es una tarea ardua. Como podrán leer allí, lo que escribí entonces causó controversia, en los comentarios se manifiestan tanto personas que estuvieron a favor, como quienes […]
Sexciudadanía
  Los vínculos entre sexualidad y ciudadanía son múltiples y vitales; entender su relación permite visualizar las problemáticas y soluciones del desarrollo humano y social con mayor nitidez desde una perspectiva integral. Existe una distancia entre la declaración de derechos y la posibilidad real de su observancia, exigencia y respeto, pues entre estas dos situaciones […]
Más leídos
Más comentados
Los grandes problemas actuales de México (145.230)
...

La economía mexicana del siglo xx: entre milagros y crisis (60.093)
...

Con toda la barba (39.041)
...

¿Por qué es un problema la lectura? (27.506)
Desarrollar el gusto por la lectura no es cuestión meramente de voluntad individual. El interés por los libros aparece sólo en ciertas circunstancias.

La distribución del ingreso en México (23.455)
...

Presunto culpable: ¿Por qué nuestro sistema de justicia condena inocentes de forma rutinaria?
Bas­tan­te han es­cri­to y di­cho ter­ce­ros so­bre Pre­sun­to cul­pa­ble....

Los grandes problemas actuales de México
Se dice que el país está sobrediagnosticado, pero en plenas campañas y ante...

I7P5N: la fórmula
Homenaje al ipn con motivo de su 75 aniversario, este ensayo es también una...

China – EUA. ¿Nuevo escenario bipolar?
No hace mucho que regresé de viaje del continente asiático, con el propósito...

La sofocracia y la política científica
Con el cambio de Gobierno, se han escuchado voces que proponen la creación...

1
Foro de Indicadores
Debates que concluyen antes de iniciarse
El proceso legislativo reciente y sus números

Eduardo Bohórquez y Javier Berain

Factofilia: Programas sociales y pobreza, ¿existe relación?
Eduardo Bohórquez y Paola Palacios

Migración de México a Estados Unidos, ¿un éxodo en reversa?
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

Donar no es deducir, donar es invertir. Las donaciones en el marco de la reforma fiscal
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

Impuestos, gasto público y confianza, ¿una relación improbable?
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

Los titanes mundiales del petróleo y el gas
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

La pobreza en perspectiva histórica ¿Veinte años no son nada?
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

La firme marcha de la desigualdad
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

Factofilia. 2015: hacia una nueva agenda global de desarrollo
Roberto Castellanos y Eduardo Bohórquez

¿Qué medimos en la lucha contra el hambre?
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

Bicicletas, autos eléctricos y oficinas-hotel. El verdadero umbral del siglo XXI
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

Parquímetros y franeleros: de cómo diez pesitos se convierten en tres mil millones de pesos
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

Factofilia: Una radiografía de la desigualdad en México
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

Factofilia: Más allá de la partícula divina
Eduardo Bohórquez y Roberto Castellanos

Factofilia: El acento está en las ciudades. Algunos resultados de la base de datos ECCA 2012
Suhayla Bazbaz y Eduardo Bohórquez