Se dice que el país está sobrediagnosticado, pero en plenas campañas y ante un nuevo sexenio, vale la pena recordar tanto como haga falta cuáles son los principales desafíos que enfrentamos como nación, y abordarlos desde distintas perspectivas. Una de estas perspectivas, sin duda esclarecedora, es la que propone nuestro autor.
Introducción
En un indirecto y muy modesto homenaje a don Andrés Molina Enríquez, autor de Los grandes problemas nacionales, libro de 1909, hace seis años intenté resumir en tres los problemas que a mi juicio eran los más importantes del país en ese momento electoral. El resultado fue un artículo que por muy diversas razones nunca se publicó. Al revisar el texto ahora veo que esos mismos tres problemas siguen siendo los que más afectan a nuestro país, simultáneamente, en los ámbitos político, económico y social.
En efecto, de los últimos 18 años del siglo pasado a la primera docena del actual hemos vivido en México el surgimiento o agravamiento de un buen número de problemas económicos, políticos y sociales, que pueden parecer efecto de los cambios políticos y económicos que ha experimentado el país desde el inicio de los años ochenta: la reforma política iniciada en el gobierno del presidente José López Portillo (1976-1982) pero concretada hasta el de Ernesto Zedillo (1994-2000) y las reformas económicas iniciadas en el de Miguel de la Madrid (1982-1988) y profundizadas en el de Carlos Salinas (1988-1994), nuestra perestroika y nuestro glasnost correspondientes.
Después de un largo periodo de estabilidad política y crecimiento económico iniciado en los años cincuenta, que concluye a finales de los sesenta y principios de los setenta, México vive un corto periodo de auge –gracias a ingresos imprevistos de divisas por exportaciones petroleras– que vino a desembocar en una crisis económica y política, dando lugar a una serie de cambios durante los años ochenta y noventa que, lejos de resolver los problemas básicos de pobreza e inequidad, parece ser causa de su agravamiento y del surgimiento de nuevos conflictos.
Es una larga lista de problemas que incluye la pobreza, el desempleo, el comercio informal, diversas formas de delincuencia, el narcotráfico, el contrabando, la emigración de mexicanos a Estados Unidos, la fuga de capitales, la corrupción, la contaminación y destrucción del medio ambiente, la impunidad, los homicidios sin resolver, los levantamientos populares regionales y el caciquismo, entre los más destacados.
Si bien algunos de estos problemas son ya muy viejos, hay dos factores nuevos que acentúan la percepción de ellos por parte de la sociedad: la consolidación de los medios de información como un nuevo poder que, ya sin cortapisas, presenta y resalta –no sin prejuicios– dichos problemas, y el desencanto de la sociedad mexicana por el fracaso de los gobiernos del PAN –el primer partido de oposición que triunfó electoralmente en más de 70 años– para enfrentar y resolver, así fuera parcialmente, algunos de ellos.
En contraste, desde hace 17 años México experimenta una gran estabilidad en materia de precios, salarios, tasas de interés y tipo de cambio, resultado de un férreo equilibrio fiscal y un superávit en divisas sin precedentes. A ello se ha llamado “estabilidad macroeconómica”, lograda por medio de la reducción sistemática del gasto público, el control del crédito hasta casi su desaparición, la contención salarial, la expansión de las exportaciones y el estancamiento del mercado interno.
Este panorama económico y social no es exclusivo de México, sin embargo. En otros países se presenta en forma más o menos similar, a pesar (o quizá por efecto) de la aplicación de políticas económicas comunes de corte neoliberal orientadas a modernizar las economías de la región en la nueva etapa de la globalización.
Entre los factores que determinan el conjunto de problemas contemporáneos más graves, hay tres que siendo de suyo conflictivos generan en combinación una dinámica social y económica perversa, un círculo vicioso que produce y amplifica otros problemas. Estos tres factores son: (1) el empobrecimiento de una parte importante de la sociedad como producto del desempleo y, en general, de la falta de oportunidades; (2) una tendencia por parte de los diversos grupos sociales a no cumplir la ley (en sentido amplio, es decir cualquier norma de carácter público) salvo en determinadas circunstancias, y (3) la total ausencia de una política industrial y comercial, por parte del Estado, orientada al estímulo de la inversión productiva. Estos tres factores son determinantes, en el caso de México, de buena parte de los demás problemas, pero no son exclusivos de nuestro país y es muy probable que se presenten también en otros países en desarrollo, aunque quizá con una intensidad y una dinámica distintas.
1. Desempleo y pobreza
La población económicamente activa asciende en México a unos 40 millones de personas. Esta población crece a una tasa anual aproximada de 3%, lo que significa una cifra de un millón 200 mil personas que cada año se incorporan al mercado laboral en busca de empleo. En años de crecimiento económico alto, el sector formal de la economía ha podido crear alrededor de 400 mil empleos por año. El resto de la nueva fuerza laboral, unas 800 mil personas, se ve obligado al empleo informal de diversos tipos (incluyendo actividades ilegales) o a emigrar a Estados Unidos. Sin embargo, la economía no ha estado creciendo a un ritmo alto y sostenido en todos estos años, lo que implica que el número de personas forzadas al empleo informal, la emigración o, de plano, la delincuencia, sea mayor y creciente, a causa de la falta de oportunidades de trabajo. Es decir, a la pobreza endémica del país se suma cada año un nuevo grupo de desempleados, lo que constituye sin duda un caldo de cultivo propicio para todo tipo de actividades ilegales. La causa directa de esta falta de oportunidades es la relativamente baja inversión en proyectos productivos generadores de empleos formales, lo que a su vez se debe en parte a la ausencia de un sistema financiero real y el abandono de la política industrial por parte del Estado en los últimos 30 años, temas que veremos más adelante.
2. Falta de respeto a las leyes
La carencia de una cultura de respeto a la ley, entendida esta en un sentido amplio, no es algo nuevo en México: podríamos ubicar su origen en la época colonial. Tampoco es exclusiva de nuestro país. De hecho no hay país en el mundo en el que todas las leyes se cumplan y respeten siempre. Pero cualquiera que sea el indicador que se tome al respecto, México se cuenta actualmente entre los países en los que las leyes se respetan en menor grado. Es evidente que en nuestra sociedad las normas se cumplen solo cuando hay una amenaza clara de sanción y autoridades con capacidad para aplicarla.
Esta carencia de cultura de la legalidad obedece a varios factores de diversos tipos, de los que destaco solo dos. El primero es que una buena parte de las leyes no se puede cumplir, ya sea porque unas leyes contradicen a otras, porque son obsoletas o inadecuadas o porque simplemente no hay autoridades en cantidad y con capacidad suficientes para hacerlas cumplir. El segundo es la ignorancia y el temor, o el desprecio que sienten los diversos sectores sociales respecto a las leyes. En los sectores de menores recursos económicos se percibe a las leyes como impuestas, es decir decididas al margen de ellos y, en consecuencia, se ven como ajenas y, en general, hechas para perjudicarlos, no para protegerlos. En los grupos de recursos económicos altos la percepción es más o menos inversa, es decir, se percibe que las leyes están para favorecerlos, pero solo a ellos y cuando no es así, se busca cualquier resquicio técnico para evadirlas. El resultado en ambos casos es el mismo: las leyes no se perciben como propias, como un mecanismo que se da la sociedad para funcionar en sus diversos ámbitos, en sí mismo digno de respeto, justo y de aplicación general.
Las autoridades de diversos tipos, niveles y orígenes partidarios no han podido eliminar la percepción que se tiene, entre la sociedad, de que son ellos los primeros en violar la ley y esto aparece como un elemento adicional de justificación moral para el incumplimiento de las normas entre los ciudadanos. De ahí que se identifique a la corrupción como un obstáculo fundamental para el avance social. Pero la corrupción es solo una parte del problema más amplio y contextual que es el incumplimiento de las leyes en general. Este tiene implicaciones políticas, económicas y sociales de primera magnitud, sobre todo en un país que intenta adecuarse a la modernidad y a la globalidad.
Desde una perspectiva económica, la falta de cumplimiento de las leyes por los diversos grupos sociales complica y limita la política económica instrumentada por el Estado, por ejemplo en lo que se refiere a la recaudación fiscal, y hace prácticamente inútil cualquier reforma que al respecto se pueda llevar a cabo. En este contexto las recomendaciones de los economistas ortodoxos, consistentes en la reducción de la regulación, han empequeñecido todavía más los ingresos del Estado y, lejos de eliminar los problemas, en realidad han favorecido el contrabando y la piratería. En términos más generales, el comercio y otras actividades económicas informales son resultado de la incapacidad del Estado para hacer cumplir las leyes y del abandono de la regulación.
En su dimensión política, el no apego a la legalidad vigente por parte de algunos grupos o personas, unos con la justificación moral que da el ser sujetos de abandono y explotación por décadas, como los indígenas, otros sin ella, combinado con la falta de capacidad de las distintas autoridades, sea para negociar acuerdos en el marco de la ley con los primeros o para aplicar la ley de manera estricta con los segundos, lleva tarde o temprano a un camino de ingobernabilidad y desintegración social. En sustitución de las leyes de aplicación general, empiezan a prevalecer usos y costumbres locales. De ello son muestra el surgimiento en diferentes zonas del país de municipios autodeclarados autónomos y de linchamientos.
3. Falta de inversión, falta de crédito y falta de política económica
Como en el caso de otros países en desarrollo, México requiere de una tasa de inversión respecto a la producción nacional de cuando menos 25% anual en términos reales y de manera sostenida para alcanzar tasas de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), a su vez, altas y sostenidas en el largo plazo, según estimaciones de organismos internacionales. Con ello, la economía podría aumentar significativamente la generación anual de empleos y, en consecuencia, la proporción de los salarios en el valor agregado, es decir, reducir la concentración del ingreso. En ninguno de los últimos 25 años la proporción de la inversión entendida como formación bruta de capital fijo ha alcanzado esa meta respecto al pib, aun considerando la inversión extranjera.
Desde la primera parte de los años ochenta, el Estado ha reducido de manera significativa su participación en la inversión total como resultado de la orientación ortodoxa de la política económica, que concibe la inversión pública como factor de desplazamiento de la inversión privada y que además considera a la burocracia paraestatal como esencialmente corrupta, ineficiente e incapaz de ser regulada. Por estas dos razones, se hacía indispensable –en esta lógica– la privatización de las empresas estatales rentables y la liquidación de las no rentables. La nueva inversión pública estaría limitada, además, por razones presupuestarias.
En estos casi 30 años de política ortodoxa, la inversión privada nacional no ha podido llenar el hueco de la inversión pública y el Estado ha tenido que revertir algunas de las privatizaciones debido a problemas de rentabilidad, derivados de una deficiente administración en manos privadas. Tales fueron los casos de la mayor parte de las carreteras nacionales de cuota, las líneas áreas nacionales y –un caso muy especial– los bancos.
La nacionalización de la banca mexicana decretada en 1982 por el gobierno de López Portillo, como medida última para frenar la fuga de divisas, no ocasionó ninguna catástrofe financiera como auguraban sus críticos. En contraste, la reprivatización de la banca ocurrida años más tarde bajo el gobierno de Carlos Salinas puso al sistema bancario mexicano en manos inexpertas y lo volvió altamente vulnerable. Aunado a ello, la apertura financiera acelerada provocó el ingreso de grandes cantidades de capital especulativo externo. Además, la sobrevaluación de la moneda hizo aún más vulnerable al sistema financiero.
En esas condiciones, la primera crisis de divisas del gobierno de Zedillo, ocasionada por el mal manejo de una decisión cambiaria, implicó la quiebra real del sistema bancario mexicano y de sus deudores. El rescate bancario y la política astringente del crédito interno, seguidos desde entonces, han impedido que haya crédito barato y oportuno para financiar actividades productivas de todo tipo, especialmente en el campo. El sistema bancario, hoy en manos extranjeras, es esencialmente rentista y especulador.
Asimismo, tanto la crisis de 94-95 como la apertura financiera anterior a ella han provocado que haya permanentemente capital mexicano en el extranjero por una cantidad más o menos equivalente a la deuda pública externa, en tanto que el ingreso neto de divisas al país que registran las reservas internacionales se inmoviliza, para evitar la ampliación del circulante y crear un blindaje preventivo de otra crisis como las de 76, 81 y 94, todas por fugas masivas de capitales.
El elemento crucial que explica la baja inversión productiva no es, sin embargo, la falta de crédito, sino la ausencia de una política industrial y agropecuaria activa por parte del Estado. Esta ausencia obedece sin duda a una concepción neoliberal de la economía. Dicha concepción se concreta en la reducción indiscriminada del gasto público, tanto corriente como de inversión; en la total ausencia de políticas comerciales, y en la falta de definición y aplicación clara de reglas de la participación de la inversión extranjera con una orientación a la integración económica y el desarrollo. Ello es lo que en realidad provoca la falta de incentivos a la inversión privada nacional.
Situación general y perspectivas
En un contexto de poco respeto a la ley (que incluye a las propias autoridades), de desregulación de las actividades económicas, de bajo crecimiento económico y de desempleo real creciente, las actividades ilegales e ilícitas tienden a proliferar, lo mismo que la emigración. Este último fenómeno incluye ahora personas con mayor grado de escolaridad. Hay, además, fuga permanente de capitales que pese a todo encuentran más atractiva y segura su inversión fuera del país que dentro de él, y las empresas locales se vinculan o venden al capital extranjero. Las empresas de exportación sin control alguno son ya indistinguibles de la industria maquiladora, que opera sin control ni programa de integración. Los empresarios mexicanos pequeños y medianos que sobreviven, lo hacen sin crédito y sin apoyo y, lo que es peor, sin que se apliquen reglas de funcionamiento que los favorezcan, de modo que en cualquier momento un monopolista nacional o extranjero los desplaza.
La transición en México de una política de masas corporativizadas a una política de ciudadanos no pasó por la revisión, modificación y establecimiento de leyes y normas que puedan cumplirse, ni por un pacto que obligue a los actores económicos y políticos a cumplir y hacer cumplir las leyes; no pasó tampoco por la discusión y puesta en marcha de un programa claro de cambio político y sobre todo económico que tuviera como eje la atención de las necesidades básicas de la sociedad, destacadamente el empleo. Pasó solo por la venta mediática del carisma de actores políticos, construida como imágenes propagandísticas de un cambio que nadie supo, bien a bien, hacia dónde iba, ni para qué. En contraste, la estructura corporativa de control de las masas por el partido hegemónico hasta antes del “cambio” sigue intacta, los problemas sociales no solo siguen sin resolverse sino que se han agravado y el camino a la ingobernabilidad parece estar en marcha.
En este contexto, la transición real en México implica que el gobierno entrante atienda primero que nada estos tres problemas básicos, y eso solo lo puede hacer mediante un nuevo pacto social en el que todos los sectores sociales y partidos participen, aunque ello pueda significar un cambio constitucional de gran magnitud. El Estado tiene que recuperar su papel de liderazgo económico y social, pero sin menoscabo de la democracia y actuando en el margen que le dejan el gobierno de Estados Unidos y sus organismos financieros. Es una difícil pero inevitable tarea. De no realizarse, regresaremos tarde o temprano al simulacro de democracia que fueron los gobiernos del pri, con movimientos casi pendulares en lo económico, unas veces a la derecha y otras al centro, unas veces liberales y otras no, eso sí siempre populistas en lo político.
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PABLO RUIZ NÁPOLES es licenciado, maestro y doctor en economía, profesor de la Facultad de Economía de la UNAM, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias y consultor de la CEPAL y del Programa del Medio Ambiente de Naciones Unidas.
Buenas tardes.
Quiero compartir este comentario señalando que la selección mexicana esta en el mundial por cuestiones de dinero y con mucha ayuda, que los dueños de los clubes mexicanos tienen todo su interés en la selección por cuanto van a ganar y esto desde el momento de clasificar que reciben millones de pesos y que decir del mundial de millones de dólares. El apego de los aficionados esta hecho gracias a los medios de comunicación que han hecho de una persona en un cliente de esta selección, que camisetas, pants en fin toda una moda tricolor, si un cliente solamente. Y si nos preguntamos de patriotismo, me digo yo cual patriotismo, en este país no existe eso solo lo usan por conveniencia. No somos Patriota, la gente normal y común no conoce su historia, y menos el significado de ser patriotas, estamos muy lejos para Amar a la bandera nacional, en un país multicultural en donde cada estado se las arregla como puede y no se identifica como nacional. Gracias
me ayudo mucho en la escuela me saque un 10 y 1 punto en historia se los recomiendo mucho les ayudara en todo caso como a mi
es sorprendente ver como estos tres aspectos han sido problemas que se vienen arrastrando desde años y que nadie haga nada por contrarrestarlos, el escrito tiene mucha razón en cuanto a los tres aspectos, el economía, la política y la industrialización, es impresionante ver cuantas personas tienen que dedicarse al empleo informal porque pues no tienen de otra, la migración es un factor que se produce a causa del fenómeno de desempleados y pues, respecto al hecho de que se necesita un gobierno que de verdad se comprometa para mejorar la situación, es completamente necesaria. necesitamos un gobierno que vele por nuestros interese y desarrollo del país, no solo desarrollo para ellos, obviamente, necesitamos informarnos y dejar la ignorancia a un lado y ponernos a trabajar en conjunto con el estado.
el articulo es interesante, recapitulas hechos históricos en el país y la realidad que vive el país, creo que esto se debe a que esta muy mal dirigido por el gobierno quien actúan a placer y también de los ciudadanos por no estar al tanto de las cosas y dejarse llevar por situaciones secundarias, lo cierto es que el gobierno fácilmente tapa sus fechorías mediante las televisoras quienes venden una cara distinta del país…
es un buen articulo coincido en las 3 problemáticas que se plantean aquí, a pesar que después de tantos años se logro el cambio de poder la realidad es que no ha cambiado en nada, se habla de falta de empleos, y digo yo no seria mejor que el dinero que se gasta en programas de ayuda se invirtiera en generar empleos, y como pueden hablar de cumplir con las leyes cuando son los que la propones los primeros en corromperlas…
Para dirigir un país, y como se plasma en el texto creo que se debería de invertir mas en el país y en nuestra propia gente que en empresas extranjeras ya que los mejores beneficios los obtienen ellos, como por ejemplo evadir impuestos o no respetar las leyes o contaminar con sus productos y por lo tanto creando mas monopolios, cuando a los mexicanos que quieren iniciar un negocio se les ponen trabas, que no pueden tener permiso para realizarlo o no hay una tasa baja en intereses en los préstamos para iniciarlo o exagerar en los impuestos etc, una infinidad de excusas, también debemos tener en cuenta que somos uno de los países que paga mayores impuestos y recibimos un salario mediocre mientras que los servidores públicos se sirven con la cuchara grande y así es como nos apoyan. Y sobre las leyes… bueno creo que solo se aplican para quien tenga dinero para poder exigirlas por que no a todos nos hacen caso cuando se violan nuestros derechos.
es un gran articulo por que habla de la economía en mexicano de como las personas y los presidentes han hecho para poder salir de ese conflicto en que se encontraba pero gracias a las soluciones que cada presidente a tenido y a planteado se a podido solucionar este problema que había esta creciendo pero aunque en algunos lugares no se a podido superar.
es una información bastante importante, considero que son temas que como mexicanos debemos de saber.
Ahora entiendo! que la situación actual de México no está nada bien… todo esto tiene que ver por la mala acción gubernamental , por las estrategias que manejan, eso hacen que nos tengan bien controlados como sociedad, diciendo falsedades o mentiras en medios de comunicación, y mas muchos de nosotros vivimos engañados.
El sistema política y económica de mx; desde hace mucho tiempo se ha venido afectando y enfrentando esta problemática, esta vez está peor que nunca, por la pobreza, el desempleo, las corrupciones otros.
Como estudiantes no debemos ser conformistas, hay que estar al tanto de todo, estar bien informados, para generar otro tipo de pensamiento en el día de mañana, de cambio y transparencia porque somos el futuro de México. !NADA ES IMPOSIBLE!
yo creo que mexico ha cambiado mucho, quien no recuerda de niños dulces o sabritas a 1 peso o a 50 centavos, ese ese el primer aspecto que creo que ha cambiando la economía, otro es la corrupción y sobre todo la política creo que este ensayo esta excelente para tomar conciencia .
en mi opinión personal creo que es un tema que nos debe interesar a todos y mas como futuros docentes, lo que hoy se esta viviendo es por culpa en parte de todos los mexicanos que lo hemos permitido, y a pesar de que sabemos que la política en mexico esta mal seguimos ahí votando por lo partidos políticos, los cambios de hace mucho tiempo hacia acá según nos ha beneficiado y todos creemos así pero en realidad nos a afectado mas a todo el país, que de lo que nos ha beneficiado, pero como siempre el gobierno disfraza todo eso para que los mexicanos no nos demos cuenta. si queremos realizar en verdad un cambio tenemos que alzar la voz como jóvenes que somos y sobre todo porque vamos a educar futuras generaciones
En mi opinión es interesante todo esto ver la realidad sobre los problemas actuales en México como es la corrupción los funcionarios de gobierno que roban o no cumplen con su trabajo, los gobernantes que se llevan el dinero de los impuestos en vez de gastarlo en obras públicas y proyectos para mejorar el país. Este tipo de acciones no permiten que el país progrese como debería.
también el narcotráfico las personas que viven de la producción y compra venta de drogas,también la violencia todos los actos de violencia que se presentan tanto en forma de crímenes como robos, asaltos, asesinatos y secuestros. el desempleo es otro gran problema para combatir. en nosotros mismos esta en cambiar a México y avanzar para ser mejor cada día con la realidad que estamos viviendo.
este tema es interezante ya que nos explica los tres grandes problemas que enfrenta nuestro pais durante años pero que en la actualidad ha agrabada ya que esto ha llevado ala pobreza, desempleo, corrupcion y que el pais este estancado y no pueda desarrollarse de manera correcta y terminar con estos problemas causado por muchos aspectos sobre todo por el mal gobierno y hay que hacer cambios para combatir este problema y sobre todo para la mejora de nuestro pais
este tema es interesante ya que nos habla de los tres problemas mas graves que esta sufriendo actualmente nuestro pais, es decir con mayor gravedad, como mencionan este problema empezo desde hace muchos años antes, pero en la actualidad ya empeoro ya que eso ha provocado dificultades economica: porque hay mas pobreza, desempleo, por tanto esto proboca la imigracion de los ciudadonos. politica: porque los gobernantes no tienen la capacidad de administrar las actividades y no tienen claro los objetivos que es de mejorar el pais por tanto esto ha hecho que mexico siga en las mismas cituaciones. social, porque existe mucha corrupcion, y la poblacion aumenta pero eso proboca que haya mas pobreza, estos puntos son las principales caracteristicas que afectan al pais, este tema nos ayuda a que nos demos cuenta de la cituacion o grabedad que esto proboca por una mala estructura por parte de los gobernantes de nuestro pais.
En esta lera podemos observar que pen México siempre han ávido problemas como económicos, políticos y sociales ya primeramente en la economía siempre la población se queja de diversas situaciones como el sueldo bajo, el no tener un trabajo fijo etc.Pues sabemos que esto empieza desde la gobernativa ya que ellos como son los primeros que se deberían de preocupar por el pueblo y no sucede a si. los políticos siempre buscan la manera de ganarse ala gente para tener un buen puesto, ya que cada persona siempre se deja envolver por lo que ellos nos dicen y al final de cuentas no realicen las cosas que aun principio ellos dieron a conocer pero sin embargo el pueblo mexica no ase nada por cambiar las situaciones si no al contrario siguen segados en el mundo que los rodea ya que cada sociedad tiene distintas maneras de ver las cosas aunque no sean para un buen mejoramiento.
esto nos enseña a darnos cuenta en que grado de error nos encontramos y sin nada por resolver y seguir en el mundo que vivimos.